8/09/2020
El pasado 23 de julio, organizaciones sectoriales, empresas y asociaciones defensoras del medio ambiente emitieron una Declaración conjunta a favor de un mayor uso de energías renovables en nuestro país, a fin de mitigar los impactos económicos por el COVID-19 y aumentar la competitividad de los entornos productivos.
Liderado por la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP), este llamado surge en plena polémica por la política energética del actual gobierno, y pone énfasis en los objetivos nacionales de mitigación climática –como llegar a cero emisiones netas para el 2050, meta a la cual México como país se ha comprometido al firmar el Acuerdo de París de diciembre 2015.
#Comunicado: Declaración de Apoyo a las #EnergíasRenovables en #México
— @WRIMexico (@WRIMexico) July 23, 2020
Listos para trabajar con @GobiernoMX por #soluciones para lograr metas renovables y ambientales buscando el beneficio de la sociedad mexicana
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Prensa: monica.lafon@wri.org pic.twitter.com/yPmADN7T5p
Por su parte, el mapa de ruta de la AMPIP prevé que el total de sus parques industriales serán inteligentes y sustentables para 2030, es decir, tendrán implementadas “medidas enfocadas en la sustentabilidad y mejores prácticas para procurar el bienestar social, el cuidado del medio ambiente y el crecimiento económico”.
En este artículo revisamos los argumentos en pro de la adopción de criterios ambientales en el diseño, construcción y operación en los parques industriales en México, una visión que Frontier Industrial ha implementado por completo desde su creación en 2011.
Soluciones en energía
El comunicado conjunto advierte que actualmente “no existen alternativas de suministro de energías renovables por parte del sector público”. Por citar un dato, la contribución al sistema eléctrico nacional de las centrales fotovoltaicas (paneles solares) fue del 3% de la energía total que se consumió en 2019, según un análisis de Expansión.
De ahí que las empresas y organizaciones firmantes (que junto a sus proveedores utilizan un volumen de electricidad de 18,117 GWh al año, equivalente a más del 5% del consumo eléctrico de México) consideraron urgente promover la inversión y acceso abierto a estas fuentes de energía, ya que así las compañías podrían “aumentar la competitividad, reducir costos operativos y preservar y crear empleo”.
“Hemos firmado compromisos internacionales impostergables para adquirir energías renovables o reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero, por ello buscamos soluciones con energías renovables para nuestras operaciones en el país”, aclararon.
Así, los firmantes se mostraron abiertos a trabajar de la mano con el gobierno, la Secretaría de Energía e instituciones del sector, así como con la academia y la sociedad para combatir el cambio climático mediante acciones que disminuyan emisiones y protejan al medio ambiente.
ESG, certificaciones y pruebas piloto
Como vimos en la revisión sobre tendencias en el desarrollo de parques industriales, la AMPIP está empujando una agenda alineada con los objetivos de desarrollo sostenible al 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En entrevista para el blog de Datoz, Claudia Ávila Connelly, directora general de la AMPIP señaló que, para cumplir con estos objetivos, los desarrolladores industriales han optado por medir su desempeño mediante estándares medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG por sus siglas en inglés).
Particularmente, los componentes social y medioambiental de los ESG se centran en aquellos esfuerzos realizados por las compañías para reducir sus niveles de contaminación o emisiones de carbono, así como en los vínculos con las comunidades donde operan.
Otra forma de mantener dichos estándares son las certificaciones ambientales para inmuebles (incluyendo naves industriales), siendo algunas de las más importantes:
- El certificado WELL, otorgado por el International WELL Building Institute (IWBI), centrado exclusivamente en la salud y el confort de los usuarios.
- La certificación LEED (Leadership in Energy & Environmental Design), respaldada por el U.S. Green Building Council y basada en criterios que impulsan una mejora global en el impacto medioambiental de la industria de la construcción.
- El estándar B-Corp, que evalúa el balance de las empresas entre la generación de utilidades y su impacto en empleados, clientes, proveedores, comunidad y medio ambiente.
Paralelamente, y como señaló Ávila Conelly a Reforma, la AMPIP ha trabajado desde hacemás de dos años en 5 pruebas piloto –en alianza con la GIZ Alemana y el World Resources Institute México– para que sus socios entiendan “la estructura legal y técnica de las energías renovables", a fin de convertirlas en una política interna de la Asociación.
Finalmente, la directora señaló que el sector de real estate industrial busca “un cambio de paradigma en el negocio”, impulsando mejores prácticas en el consumo de agua, eficiencia energética, gestión de residuos, manejo del agua, etcétera.
Esta nueva visión ha probado ser beneficiosa para desarrolladores, inversionistas, empresas inquilinas y trabajadores de los parques industriales en México pues, además de ahorros en la operación diaria, se crea un círculo virtuoso donde:
1. Mejora la atracción y retención de talento. La fuerza laboral joven (millenials) ya no sólo busca un salario, sino un buen ambiente de trabajo –con calidad del aire, limpieza, movilidad, políticas de inclusión y áreas recreativas–, lo que a su vez favorece la productividad.
2. Se incrementa el valor de las rentas. En tiempos de sobreoferta, se puede cobrar más en un edificio sustentable.
3. Aumenta la satisfacción de inquilinos y se reduce su rotación.
4. Se genera plusvalía en la tasa de capitalización (cap rate).
“El propósito del negocio de las empresas globales se alinea con la inclusión social y el cuidado del planeta”, concluyó Ávila Conelly.
Los edificios generan el 33% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Con la Certificación Net Zero Energy Building (NZEB) se puede lograr un alto desempeño energético con cero emisiones de carbono. #netzero #ODS #Sustentabilidad #ParquesIndustriales @WorldGBC pic.twitter.com/X2Xnzfo7HZ
— Asociación Mexicana de Parques Industriales (@AMPIP) August 31, 2020
En Frontier Industrial entendemos la importancia y el valor de la implementación de buenas prácticas ecológicas para empresas que participan tanto en el mercado nacional como en el internacional. Por eso, nuestro portafolio de parques industriales en México cuenta con naves Clase A con certificación LEED, red fotovoltaica auxiliar y otras ventajas que apoyan al crecimiento sustentable de nuestros clientes. Conócelo.
