Desabasto eléctrico pone 'freno' a proyectos industriales: AMPIP

Entre los grandes retos de la agenda nacional, el tema energético es clave para aumentar la competitividad del país, y con ello seguir impulsando la llegada de Inversión Extranjera Directa (IED). Sin embargo, debido a problemas de inversiones, trámites y suministro, “está resultando muy complejo” que los parques industriales en México logren ofrecer el servicio.

Así lo denunció Claudia Ávila Conelly, directora general de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP). Y es que, según cálculos de la organización que representa a 370 parques industriales que albergan a cerca de 4 mil empresas nacionales y extranjeras, “al menos 8 de cada 10 proyectos inmobiliarios industriales nuevos están atorados por la falta de energía”.

Infraestructura pendiente e insuficiente

La líder de AMPIP alertó que en “Querétaro, Guanajuato, Tijuana, Zapopan, Saltillo y Piedras Negras hay varios casos críticos” con abasto insuficiente por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Asimismo, existen regiones del país que aún padecen la falta de este tipo de infraestructura, con varios proyectos pendientes o cancelados dentro del llamado Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen) de la Secretaría de Energía.

Fuente: Reforma/Prodesen.

Capacidad de generación limitada

En los casos donde existen líneas de transmisión, pero no hay infraestructura de conexión para dirigir el suministro hacia las zonas industriales, la Ley de la Industria Eléctrica contempla un pago de cuota o aportación de los particulares para realizar las obras, ampliaciones o modificaciones necesarias (Artículo 35 del texto vigente).

Sin embargo, esto puede derivar en cargos adicionales a los desarrolladores de parques industriales en México, ya que éstos deben costear la inversión en subestaciones y luego donarlas a CFE.

Esto también implica que los operadores del sitio deben “apartar el suministro, y en ocasiones hacer inversiones adicionales en la red, lo cual termina encareciendo los proyectos (y hacer que) queden suspendidos”, advirtió AMPIP.

¿Y qué hay sobre los productores independientes y privados? Proyecciones del IMCO señalan que de frenarse la participación en el suministro por parte de estos actores –como pretende la última reforma legislativa–, la CFE podría incurrir en costos adicionales hasta por 382.8 miles de millones de pesos.

Lo anterior sería consecuencia no sólo del pago por indemnizar a los productores privados al retirarles el despacho, sino porque éstos tienen costos promedio mucho más baratos de generación de megawatt-hora (MWh) de electricidad.

Fuente: IMCO.

Auto abasto: trámites estancados

Como alternativa a estas limitaciones, la AMPIP considera que “el auto abasto de energía sería la forma más ágil y eficiente para contar con el servicio de energía eléctrica en el corto plazo”.

Así, se están creando esquemas propios de generación de energías limpias dentro de los parques industriales en México, ya sea a través de programas de AMPIP o impulsados por los desarrolladores y los mismos inquilinos.

Sin embargo, el sector industrial percibe que algunos de estos proyectos “no están caminando” ya que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) tiene varias solicitudes pendientes en permisos de generación, registros de Usuario Calificado y contratos de interconexión.

Respuesta de CFE

Ante los señalamientos hacia la paraestatal, su director general, Manuel Bartlett, afirmó que “la CFE está más fuerte que nunca” pues tiene varios proyectos de inversión que permitirán aprovechar y fortalecer el parque de generación de la CFE en diferentes puntos del país.

Entre los ejemplos (mencionados por funcionarios de la dependencia en conferencia de prensa) están:

• 6 proyectos de generación con una inversión de 2,900 millones de dólares.
• Renovación del conjunto de generación hidroeléctrica para mejorar la eficiencia (equipos con más de 50 años de antigüedad).
• Licitación de 47 obras para fortalecer las líneas de transmisión y distribución eléctricas (en especial durante contingencias), con una inversión aproximada de 48,572 millones de pesos entre 2021 y 2025.

“(Con estas obras) se atiende el crecimiento en la demanda eléctrica de los sectores industrial, comercial, habitacional y de servicios básicos, con la calidad, confiabilidad y seguridad requeridas por el Sistema Eléctrico Nacional”, señaló Guillermo Arizmendi Gamboa, director corporativo de Planeación Estratégica de CFE.

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Es claro que las aristas de este tema dependen del punto de vista de las partes involucradas. Pero es un hecho también que ante el arribo de más proyectos de inversión al país (junto con el requerimiento de mayores volúmenes de energía de la tecnología industrial actual), se necesita de una voluntad de cooperación continua entre gobierno e iniciativa privada para resolver la situación y apuntalar el desarrollo del país en forma ordenada y sostenible.

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